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A la mayoría de la gente le gusta o le gustaría llevar una vida equilibrada, en la cual puedan tener seguridad respecto a la estabilidad de los distintos aspectos que la conforman.

 De la misma manera transcurre un proceso biológico en el organismo que está presente en todo momento, buscando un estado de equilibrio.

¿Qué es la homeostasis?

La homeostasis es un proceso biológico que permite al organismo que se encuentre en óptimas condiciones, establecer un equilibrio y balance en relación a alteraciones que puedan surgir de manera interna y externa, con el motivo de mantener un funcionamiento adecuado.

Este proceso se mantiene a través de diversos mecanismos de control que funcionan en las células, los tejidos y los órganos.

 Los principales componentes encargados de su mantenimiento se clasifican cómo:

-Centro de control.

-Efector.

-Estímulo.

-Mecanismo de retroalimentación.

-Receptor.

En la homeostasis constantemente participan distintos procesos para poder mantener un balance al atender los cambios que surjan de manera externa e interna, esto para ajustar aspectos en relación a:

-Concentraciones de ácido.

-Electrólitos.

-Energía.

-Hormonas.

-Nivel de azúcar en la sangre.

-Oxígeno.

-Presión arterial.

-Proteínas.

-Temperatura

Homeostasis: El equilibrio en la retroalimentación negativa

Es un concepto homeostático en el cual un sistema u organismo opta por una respuesta automática y contraria a los cambios que le sean impuestos.

 En este caso el objetivo es regular la alteración que sufrió en relación a su estado previo y regresar al mismo. De esta manera el organismo intenta disminuir el impacto ocasionado por el factor interno o externo.

La retroalimentación negativa puede llegar a ser abrupta y fuerte ante el cambio interno o externo, y a su vez puede ser paulatina por lo que durante ello, la respuesta del organismo puede oscilar visto desde el punto de equilibrio.

Homeostasis: El equilibrio en la retroalimentación positiva

Por otro lado, una retroalimentación positiva es aquella que ante el impacto recibido ofrece una respuesta que favorece el aumento de dicho impacto. Este suceso puede desencadenar una serie de procesos que propicien un ciclo que afecte al organismo hasta encontrar el equilibrio.

Siempre el equilibrio será el objetivo, y el organismo encuentra los canales para lograrlo.

Fuente: National Institutes of Health, National Library of Medicine (NIH), American Society for Biochemistry and Molecular Biology (ASBMB).