Deambulan por pasillos y consultorios médicos, se hacen estudios de laboratorio y todo tipo de exámenes y análisis que resultan dentro de los límites normales. Algunos luchan contra una ansiedad debilitante, una depresión, una confusión mental y la fatiga. Pueden ser jóvenes o no, pero les cuesta levantarse de la cama. Una respuesta inmune inflamatoria puede ser la explicación para entender el origen de estos problemas.
Son millones de personas que pasan años sufriendo sin saber qué hacer, de hecho, la depresión es ahora la principal causa de discapacidad en todo el mundo, y los trastornos de ansiedad afectan a más de 40 millones de estadounidenses.
Las enfermedades autoinmunes son una de las principales causas de muerte en los Estados Unidos, pero muchos creen que no se las diagnostica apropiadamente.
Existe una serie de investigaciones que están estudiando de qué manera la inflamación puede dañar la barrera hematoencefálica (BBB) y posiblemente llevar a problemas cerebrales.
Según un estudio, esta inflamación puede activar las células microgliales inmunes del cerebro, lo que puede desencadenar una respuesta inflamatoria autoinmune. En otras palabras, el sistema inmunológico de las personas podría atacar a tu cerebro y el tejido nervioso.
Para diagnosticar oficialmente una enfermedad autoinmune, el sistema inmune tiene que destruir una cantidad significativa de tejido (en este caso, el cerebro o el sistema nervioso).
Hay tres etapas principales en el espectro autoinmune:
1. Autoinmunidad silenciosa: Existen análisis de anticuerpos positivos, pero no hay síntomas evidentes.
2. Reactividad Autoinmune: Existen análisis de anticuerpos positivos y síntomas.
3. Enfermedad autoinmune: Hay suficiente destrucción corporal como para que se diagnostique.
Queremos Conocer su Opinión
¿Cómo califica el contenido que acaba de leer/ver?
¿Qué tanto me motiva a vivir saludable?
Yo soy...
Proveedor de Salud
Administrador o Recursos Humanos – Empresa
Asegurado
Corredor de Seguros
Ninguna de las Anteriores
Muchos pacientes no están lo suficientemente enfermos como para ser diagnosticadas con una enfermedad autoinmune, pero si dañada por los efectos de la reactividad autoinmune del cerebro.
Y eso puede llevar a otros problemas. De hecho, la investigación demostró que la depresión y la ansiedad son más frecuentes en pacientes con enfermedades autoinmunes que con enfermedades degenerativas crónicas. Los investigadores sospechan que esto es debido al efecto directo de las citoquinas inflamatorias en el sistema nervioso central.
Además, una persona con una enfermedad autoinmune tiene mayor probabilidad de que su sistema inmunológico ataque a otro sistema de su cuerpo, conocido como poliautoinmunidad. Por ejemplo, un estudio sobre lupus encontró índices más altos de ansiedad debido a la inflamación del cerebro.
Hay que tener en cuenta que estos estudios se realizaron con personas previamente diagnosticadas con una enfermedad autoinmune. Por lo tanto, ¿Qué pasa con todas aquellas no diagnosticadas en la etapa 2 de la reactividad autoinmune?
Puede tratarse de un problema auto-inmune si:
- Tienes un historial familiar de enfermedades autoinmunes.
- Tienes un historial familiar de problemas de salud mental.
- Has sido diagnosticado con una enfermedad autoinmune.
- No mejoras con los medicamentos o la terapia conductual.
Si sospechas que la reactividad autoinmune podría estar dando lugar a problemas de depresión y ansiedad, aquí hay algunos pasos que puedes seguir, explica el Dr. William Cole, experto en medicina funcional de la Universidad de Los Angeles en una columna publicada en la web mindbodygreen.com.
- Análisis de reactividad autoinmune cerebral, busca el aumento de anticuerpos.
- Análisis de Microbioma, tu intestino es tu "segundo cerebro", donde se hace el 95% del neurotransmisor “de la felicidad” llamado serotonina. El síndrome del intestino permeable y SIBO, o el sobrecrecimiento de pequeñas bacterias intestinales, se asocian con muchas condiciones cerebrales autoinmunes.
- Pruebas de Trigo y Gluten: Una visión integral de la intolerancia al gluten incluye buscar anticuerpos transglutaminasa 6 (TG6). Raramente se hacen exámenes de este tipo, sin embargo, algunos estudios muestran que pueden dañar el tejido neurológico.
- Análisis de Reactividad inmune a los alimentos: El azúcar y los productos lácteos son algunos de los alimentos desencadenantes más comunes, pero también he visto que algunos de los más saludables vegetales son inmunorreactivos en algunos pacientes. La dieta que funciona para una persona puede no ser adecuada para ti y los análisis pueden ayudar a detectarlo.
- Análisis de Autoinmunidad Predictiva: detectar el aumento de anticuerpos en las glándulas suprarrenales o derivados de problemas autoinumes de tiroides como la enfermedad de Hashimoto o de Graves
Hay muchas variables a tener en cuenta y todas son diferentes. No hay soluciones rápidas o píldoras mágicas cuando se trata de problemas cerebrales autoinmunes. Considera hacerte una evaluación gratuita para ver si la medicina funcional es adecuada para ti, concluye el experto.
Más para leer
© 2024 Pan-American Life