A juzgar por la fotografía, parece ser que a Flynn Bloom, el hijo de la modelo Miranda Kerr, no sólo le gusta que esté nevando, sino también le fascina comerse los copos de nieve. Ante esto, su madre luce despreocupada sobre los riesgos que podría traer.
Puntos Clave
- El hijo de la modelo Miranda Kerr fue sorprendido comiendo nieve.
- En esta época muchos niños hacen esta práctica con el consentimiento de sus padres.
- Sin embargo, hacerlo puede ser dañino para la salud.
Para muchas mamás puede ser inofensivo que sus hijos consuman como diversión un poco de nieve en esta temporada, sin embargo, existen ciertos peligros que hay que tomar en cuenta.
Una de las principales razones por las que muchos se preguntan si es bueno comer la nieve es por la presencia de bacterias. Para comenzar, hay que tomar en cuenta que la nieve que cae del cielo no sale de un sistema de filtración por lo que es muy probable que se encuentre llena de muchos microbios.
De acuerdo con el meteorólogo Tom Skilling, realizar esta práctica no es una buena idea ya que la nieve contiene contaminantes atmosféricos potencialmente dañinos. “No es que la nieve sea inmediatamente tóxica, pero puede contener productos químicos que no desearás poner en tu cuerpo”, manifestó.
Por otra parte, Frank Wania, investigador químico ambiental de la Universidad de Toronto advierte que la atmósfera es extremadamente eficiente en el transporte de contaminantes”, de hecho, se estima que los agentes tóxicos que se encuentran en la atmósfera de países como India podrían encontrarse en la nieve del norte de Canadá en sólo cinco días.
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En tanto, el Dr. Jeff Haffney, del Laboratorio Nacional de Argonne es más específico y asegura que los copos de nieve contienen cualquier tipo de cosas que flotan en el aire, por ejemplo, las sustancias químicas que se encuentran en la lluvia ácida, las bacterias, los sulfatos, nitratos e incluso gasolina con plomo.
Otro de los riesgos que atraería esta actividad sería sufrir cortaduras en la lengua o incluso dientes rotos, debido a la presencia de pequeños vidrios o piedas que podrían estar en las bolitas de nieve que los niños recogen del suelo.
Ahora que sabemos esto, seguramente si nos encontramos al pequeño Flynn haciendo esta travesura trataríamos de advertirle a su madre que lo que está haciendo el pequeño podría traerle problemas a su salud.
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