Las personas con cáncer de colon en estadio III que regularmente comen nueces tienen un riesgo significativamente menor de recidiva y mortalidad que quienes no lo hacen, señala un nuevo estudio del Yale Cancer Center.
La investigación, publicada en el Journal of Clinical Oncology, examinó a 826 pacientes con cáncer de colon inscriptos en un ensayo clínico aleatorizado auspiciado por el Instituto Nacional del Cáncer (NHI, por sus siglas en inglés). Después de un seguimiento de 6.5 años, los pacientes que consumieron dos o más onzas de nueces por semana, particularmente nueces de árbol (como almendras, nueces de Brasil, anacardos, avellanas, macadamias, pacanas, piñones, pistachos y nueces), tuvieron una mejora del 42% en la supervivencia libre de enfermedad y una mejora del 57% en la supervivencia general.
Las nueces contienen nutrientes importantes como grasas insaturadas, proteínas de alta calidad, vitaminas (por ejemplo, vitamina E y folato), minerales (como magnesio, calcio y potasio) y fitoquímicos que pueden brindar protección contra el riesgo cardíaco, además de poseer propiedades antioxidantes.
"Investigaciones anteriores han demostrado que el consumo de nueces puede ayudar a reducir el riesgo de diabetes tipo 2, síndrome metabólico, obesidad y resistencia a la insulina. Estas condiciones se han asociado con un mayor riesgo de recurrencia del cáncer de colon y la mortalidad", explicó el doctor Charles S. Fuchs, líder del estudio y director del Yale Cancer Center.
Excluyendo a los cánceres de piel, el cáncer colorrectal es el tercer cáncer que se diagnostica con más frecuencia tanto en los hombres como en las mujeres en Estados Unidos. Para el año 2018, los cálculos de la Sociedad Americana Contra el Cáncer son de 97,220 casos nuevos de cáncer de colon en el país.
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“Estos hallazgos concuerdan con otros estudios observacionales que indican que una serie de comportamientos saludables, que incluyen un aumento de la actividad física, mantener un peso saludable y una menor ingesta de azúcar y bebidas endulzadas, mejoran los resultados del cáncer de colon. Destacan así la importancia de enfatizar los factores dietéticos y de estilo de vida en la supervivencia del cáncer de colon", dijo Temidayo Fadelu, uno de los autores del estudio e investigador postdoctoral en el Dana-Farber Cancer Institute.
En general, una alimentación con un alto contenido de frutas, verduras y granos integrales y con un bajo contenido de carnes rojas y procesadas se ha relacionado con una disminución del riesgo del cáncer colorrectal
Los frutos secos también podrían desempeñar un papel positivo al satisfacer el hambre con una menor ingesta de carbohidratos u otros alimentos, señaló Fuchs. Por ejemplo, una porción de una onza de alrededor de 24 almendras contiene aproximadamente 200 calorías, incluyendo 14 gramos de grasa. "La gente me pregunta si el aumento del consumo de nueces conducirá a la obesidad, pero lo realmente interesante es que en nuestros estudios, y en la literatura científica en general, los consumidores regulares de nueces tienden a ser más delgados", destacó el científico.
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