Sexo
¿Qué prefieres comer o tener sexo?
El 34% de las mujeres respondió que prefiere la comida. Algunas razones por las que puedes estar cansado del sexo.
Por Pan-American Life
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Si estás cansado del sexo o te aburre tu vida sexual, te interesará saber que existen muchas razones para esto: en una reciente encuesta realizada por el equipo del Dr. Oz, el 34% de las mujeres aseguró que la comida les interesa más que su vida sexual. Aquí te presentamos algunos de los motivos que pueden impedirte disfrutar del sexo.
El cansancio
Si tu vida sexual está de alguna forma instalada en la fatiga crónica y la falta de deseo, es hora de buscar el motivo y por ende, una solución. "Todo el mundo anda como loco, ocupado, sin tiempo para nada y corriendo para todos lados", explica la terapista sexual Sheri Winton, autora del sugestivo libro" Anatomía de la excitación sexual de la mujer: mapas secretos del placer sepultado".
¿Será fatiga crónica?
La fatiga crónica es una enfermedad afecta al 0.3% de la población, sobre todo mujeres de entre 30 y 40 años. Se trata de un cuadro de cansancio que tiene al menos 6 meses de duración, que no está asociado a ninguna condición médica y que interfiere con la calidad de vida del paciente. El problema se siente mucho más al final del día.
El mejor momento del día
Si sospechas que sufres de fatiga crónica y tu vida sexual se ve anulada por la falta de energía que sientes a la noche, busca el momento del día en que mejor te sientas e intenta generar un momento de intimidad. El buen sexo no tiene hora.
Problemas en la relación
Uno de los principales motivos por el que hombres y mujeres pierden el deseo sexual es por los problemas que existen en la pareja. El psicólogo autor del best seller "Los hombres son de Marte y las mujeres de Venus" lo explicó muy bien: el hombre necesita buen sexo para sentirse bien en pareja, la mujer necesita estar bien en pareja para tener una buena vida sexual.
Enojado o frustrado
"Es mucho más fácil decir que estamos cansados que tener que enfrentar un problema y discutirlo a fondo", dice la experta. Muchas veces existe enojo y frustración ocultos, que son emociones que desmotivan sexualmente. Prueba conversando lo que te sucede, si la comunicación abierta no es posible, considera recurrir a un terapeuta o facilitador.
La caja boba
Al final de un largo día lo más fácil suele ser zambullirse a ver televisión y si después de un rato, ninguno de los dos esté probablemente motivado a iniciar una relación sexual, sino más bien de dormirse. La experta recomienda apagar los aparatos electrónicos pero no lanzarse de lleno al sexo, sino abrazarse, conversar y dejar que la situación se genere en ese espacio de intimidad.
Agenda apretada
Organiza tu agenda de modo que tengas algo de tiempo para ti y la pareja. Ya sea para hacer ejercicio, ir a la peluquería o simplemente descansar. Una agenda plagada de cosas y demasiado apretada puede significar cero energía para cosas extras, entre ellas, el sexo. "Mira tu vida y elige qué vas a cortar, algo debes sacar, pero no tu vida sexual", advierte la experta.
Una encuesta significativa
Quizás la encuesta no es muy rigurosa en lo científico pero sí es significativa. Según dijo en un video publicado en la web, después de entrevistar a nada menos que 22 mil mujeres sobre su vida sexual, el Dr Oz asegura que el 51% de ellas no está satisfecha con su vida sexual y el 34% dijo que prefería una buena comida a tener relaciones sexuales con su pareja.
Altas expectativas
El pretender que tu vida sexual luzca como en las películas XXX puede ser un enemigo del deseo posible. Si estás cansada del sexo y te sientes presionada, da un paso atrás y comienza por demostrarle afecto a tu pareja. El abrazo y los mimos pueden o no llevar al sexo pero a todo el mundo le gustan, dice Winston.
¿Del corazón como anda?
Los problemas de erección pueden relacionarse con problemas cardíacos. Así como para el hombre puede ser devastador, la mujer puede entender la falta de erección como falta de deseo de su pareja, o como falta de atractivo en su persona. "La falla congestiva cardiaca puede hacerte sentir cansado en general y perder mucha funcionalidad, incluso en tu vida sexual" agrega.
Problemas hormonales
El deseo sexual y las hormonas van de la mano. Tanto en lo que se refiere a testosterona, que controla la energía sexual y la libido del hombre, como en lo que se refiere a oxitocina y estrógenos también relacionadas con el deseo sexual en la mujer y el placer que puede originar una relación amorosa.
Terapia de reemplazo
Puedes realizarte un examen de sangre y analizar el nivel de tus hormonas. Consulta con tu médico y evalúa la situación y el funcionamiento de tus hormonas para determinar si necesitas algún tratamiento de reemplazo. Hay investigaciones que aseguran que con psicoterapia las hormonas también mejoran.
¿Estás deprimido?
Si se sientes desanimado, cansado, sin energía para muchas cosas que solías disfrutar, incluso el sexo, notas cambios en tu sueño y alimentación, es posible que estés deprimido. El primer paso es consultar a un profesional de la salud mental y con la mejora de tu estado de ánimo y con eso, vendrá el entusiasmo por el sexo también.
Medicamentos y más
Si bien es cierto que algunos medicamentos psiquiátricos pueden afectar tu libido o energía sexual, muchas veces son necesarios en una etapa del tratamiento. Está probado también que hábitos saludables como una dieta balanceada, dormir bien y realizar ejercicio en forma regular también mejoran el estado de ánimo y el deseo sexual.
Aburrimiento
"Si tienes algún hobbie, libro que estás leyendo, tai chi o astrología, cualquier cosa eu motive y te despierte pasión puede trasladarse a un mejor sexo", explica la experta en sexualidad. El sexo cansado y desmotivado también puede ser parte del aburrimiento. Si te sientes así, comienza por buscar cosas que te diviertan, aunque no sean sexuales, después esa alegría y pasión se expandirá.
Ojo con demasiado ejercicio
Si bien es sabido que el ejercicio mejora tu vida sexual, levanta tu autoestima y le da un impulso de energía a toda tu vida, demasiada actividad física puede agotarte y dejarte cansado. Los expertos recomiendan una rutina de al menos 30 minutos de actividad física al menos cinco días a la semana. Salvo que estés entrenando para algo específico, guárdate un poco de energía para tu intimidad.
