1. Palomitas para microondas

Sabemos que son el alimento ideal cuando se trata de ver una película en casa, pero muchos de los químicos que abundan en este producto, como el ácido perfluorooctanoico, el cual está en el revestimiento de la bolsa, está relacionado con la infertilidad en los seres humanos, según un estudio de la Universidad de California.

Alimentos que combaten el colesterol

Palomitas mortales

De acuerdo con esta investigación, al aplicar ácido perfluorooctanoico en animales, se halló que puede causarles daños en el hígado, testículos y páncreas. Además, al entrar bajo el trabajo del microondas los químicos se evaporan y llegan a las palomitas que más tarde serán consumidas por el ser humano.

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2. Comida congelada

Para muchas familias no hay nada más cómodo y placentero que sacar este tipo de alimentos de las neveras de los supermercados y cocinarlos cuando sea necesario. Sin embargo, comer estos productos de manera frecuente, además de saciar tu paladar (según tu gusto) hará que tengas problemas cardiacos. ¿Por qué?

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Ricos en sales

La respuesta es sencilla. Parte del secreto para que este tipo de productos se conserven durante mucho tiempo es que contienen niveles de sodio muy altos, incluso, rebasan los límites saludables, lo cual afectaría tu presión sanguínea y podría conducirte a eventos cardiacos fatales como un infarto.

3. Embutidos

¿Te gustan las salchichas, así como el jamón y otros derivados? Las carnes procesadas forman parte del desayuno y del diario vivir de muchas personas; sin embargo, estos alimentos contienen, generalmente, nitritos y nitratos, unos compuestos para extender su vida útil, y que se ha relacionado con cáncer en animales.

Hot dogs del terror

Según explica la nutricionista Susan Levin, “un hot dog podría enviarte a la tumba”, esto debido a que, “las carnes procesadas como las salchichas pueden aumentar el riesgo de padecer diabetes, enfermedades del corazón y cáncer”.

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4. Arroz blanco

De acuerdo con investigadores de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, en EU, este alimento puede causar aumentos bruscos en los niveles de glucosa en la sangre, lo cual es un riesgo para padecer diabetes.

¿Cuál es el problema?

Lo sabemos, este alimento se ha consumido durante los siglos de los siglos en muchos países, pero fue hasta el siglo XX cuando comenzó a refinarse y a consumirse como arroz blanco. Desde el punto de vista de la salud pública lo mejor sería reemplazar los granos refinados por los integrales.

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5. Productos de soya

Se ha encontrado que los alimentos de soya transgénicos contienen un sinfín de ingredientes “OGM”, los cuales han sido procesados usando un producto altamente tóxico como el hexanol que es capaz de provocar problemas como defectos de nacimiento, problemas del sistema reproductivo y cáncer. ¡Cuidado!

6. Mantequilla

¿Quién no se puede resistir a un pedazo de pan con un poco de mantequilla untada? Desafortunadamente después de que sepas que gracias a sus componentes, entre los que se incluyen las grasas trans, del cual se ha encontrado que contribuye a problemas del corazón, evitarás probarla.

Grasas peligrosas

Las grasas trans es un tipo de grasa no natural que se obtiene por el proceso de hidrogenación, el cual convierte los aceites vegetales líquidos en una grasa sólida. Se ha encontrado que este tipo de grasas aumentan las lipoproteínas de baja densidad (LDL o colesterol malo) y reducen el colesterol bueno (HDL) pudiendo causar infartos.

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7. Alimentos enlatados

Son una solución rápida cuando no hay tiempo, pero no es bueno para tu salud. Según Frederick Vom Saal, endocrinólogo de la Universidad de Missouri el problema radica en que los revestimientos de las latas contienen bisfenol-A, un estrógeno sintético relacionados con problemas reproductivos hasta males cardiacos, la diabetes y la obesidad.

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8. Comida rápida

¿Comes con frecuencia las hamburguesas, refrescos y demás alimentos que sirven en los lugares de comida rápida? Entonces ten cuidado, pues una investigación hecha por el Departamento de Salud y Recursos Humanos reveló que las personas que comen dos veces por semana esta comida se asocian con la obesidad y la diabetes.

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9. Sopas instantáneas

Muchos piensan que se trata de una opción rápida, barata y saludable para alimentarse. Sin embargo, un estudio hecho por la Universidad Complutense de Madrid afirma que por su contenido en glutamato monosódico, esta comida despertó en varios animales un hambre ansiosa cuya voracidad se incrementó en un 40%.

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Obesidad inminente

De acuerdo con el estudio, el glutamato actúa sobre las neuronas de una región cerebral conocida como núcleo arcuato, e impide el funcionamiento adecuado de los mecanismos inhibidores del apetito. Esto quiere decir que las sopas instantáneas, indirectamente, tienen que ver con el aumento de la obesidad en la población.

10. Endulzantes artificiales

Si te gusta endulzar tu café o té con este tipo de productos, deberías tener cuidado, ya que un estudio hecho por investigadores de la Universidad de Purdue, en Indiana, Estados Unidos, reveló sus efectos negativos, como por ejemplo, aumentar el riesgo de padecer obesidad y diabetes.

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¿Por qué?

Aunque muchos crean que estos productos son saludables y que ayudan a bajar de peso, la verdad es que al consumirlos, muestran patrones de activación alterados en los centros del placer en el cerebro en respuesta al sabor dulce, lo que hace que el consumidor se exceda en alimentos ricos en calorías y en azúcares, según el estudio.

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