¡Manos a la obra!

Según los expertos de Harvard, son varias las medidas que podemos tomar para fortalecer nuestro sistema inmune y enfermarnos menos. Sin duda, señalan en ese estudio, adoptar estrategias de vida saludables es la primera medida que se puede tomar.

Poca vitamina D provoca aumento de peso

La dieta y el ejercicio cuentan

“Cada parte del cuerpo, incluido el sistema inmune, funciona mejor cuando se lo protege de los ataques del exterior y se apuntala con estrategias sanas como: no fumar, dieta saludable, ejercicio, control del peso y de la presión arterial, beber alcohol con moderación, dormir suficiente, higiene y controles médicos periódicos”.

Fortalece las defensas

La alimentación juega un rol fundamental, en especial para prevenir las enfermedades estacionales como la gripe u otros problemas de salud como la artritis, las alergias o incluso el cáncer. La Academia de Nutrición y Dietética de los EE.UU. enumeró los alimentos que contienen nutrientes que pueden cumplir con esta misión: fortalecer el sistema inmune.

1. Pescado (proteína)

Las proteínas son una parte importante en el mecanismo de defensa de nuestro cuerpo. Por eso, comer una variedad de alimentos ricos en proteínas ayudará al sistema inmune. Entre las proteínas recomendadas, se incluyen: pescado, mariscos, carne sin grasa, huevos, frijoles y guisantes, productos de soya, nueces sin sal y semillas.

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2. Zanahoria (vitamina A)

Todos los alimentos que contienen vitamina A ayudan a regular el sistema inmune y protegen la piel y los tejidos de la boca, el estómago, los intestinos y los pulmones contra las infecciones. Algunos alimentos que contienen vitamina A: batatas, zanahorias, coliflor, pimiento rojo, huevos y damascos. También, los fortificados.

El sobrepeso afecta a los pulmones

La obesidad puede causar asma, al alterar el sistema inmune, reveló un estudio realizado por el Boston Children´s Hospital. Los investigadores sugieren que un nuevo tratamiento para el asma en personas que no responden a otros tratamientos podría ser, entonces, controlar el sobrepeso y evitar la obesidad. También, reforzar el sistema inmune.

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3. Naranjas y toronjas (vitamina C)

Todos tienen algo en común: gran cantidad de vitamina C, que protege contra las infecciones al estimular la formación de anticuerpos y estimulando el sistema inmune. Al incluir más vitamina C en la dieta, uno está automáticamente previniendo varias enfermedades. Alimentos con vitamina C: frutas cítricas como pomelo, naranja y mandarina, pimiento rojo, papaya, frutilla, tomate o cualquier alimento que esté fortificado con vitamina C como los cereales.

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4. Manteca de maní (vitamina E)

Los alimentos con vitamina E son excelentes antioxidantes. Su principal beneficio es que neutralizan los radicales libres y mejoran la función del sistema inmune. Alimentos con vitamina E: cereales fortificados, semillas de girasol, almendras, aceites vegetales, avellanas, manteca de maní y espinaca.

5. Nueces (zinc)

Las nueces u otros frutos secos enteros contienen zinc, que además de defender contra las enfermedades tiene la propiedad de ayudar a curar y cicatrizar. Alimentos que tienen zinc: carne sin grasa, aves de corral, mariscos, leche, granos enteros, frijoles y nueces.

6. Germen de trigo (vitamina B6)

La vitamina B6 es una vitamina hidrosoluble, explica la Academia de Nutrición y Dietética, que se elimina a través de la orina y se repone diariamente con la dieta. Por eso es importante consumir alimentos que contengan esta vitamina: germen de trigo, carne, huevos, pescado, verduras, legumbres, nueces, granos integrales y cereales.

7. Probióticos

Estos alimentos contienen microorganismos vivos que si se los ingiere en cantidades suficientes puede equilibrar la flora intestinal y potenciar el sistema inmunitario, según defina la Organización Mundial de la Salud. Ejemplos: yogures, leches fermentadas, kéfir o yogur búlgaro y jocoque (habitual en la cocina mexicana).

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