El reiki es una técnica milenaria que emplea la curación práctica o la curación de la palma para canalizar o redirigir "qi", la forma oriental de la fuerza vital, con el objetivo de mejorar la salud y el bienestar. Consiste en poner las manos ligeramente arriba o sobre el cuerpo vestido, trabajando sobre el frente y la espalda en una lenta progresión de posiciones.

El reiki no tiene doctrina religiosa y es aceptado por personas de todos los orígenes y creencias. A pesar de su popularidad en el ámbito medicinal, esta práctica ha sido verificada científicamente como efectiva por muy pocos profesionales médicos. Por ello, debe verse como una terapia complementaria para afecciones que requieren de tratamientos tradicionales.

Actualmente, se enseñan y practican diferentes estilos y versiones históricas del reiki. Los practicantes creen que los efectos terapéuticos se obtienen de "la energía de vida universal" que ofrece fuerza, armonía y equilibrio al cuerpo y la mente. Esa energía se transfiere a las personas a través de la imposición de las manos y se vincula a ciertos beneficios:

Contra la ansiedad

La relajación profunda producida por el reiki ha sido reportada de forma anecdótica por los propios pacientes, quienes aseguran que les ha aliviado la ansiedad e inquietud, brindándoles un sentimiento de bienestar psicoespiritual.

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Reduce la presión arterial

Un megaestudio halló que el reiki fue mejor que el placebo para alcanzar un estado físicamente relajado y también resultó más eficaz para disminuir la frecuencia cardíaca en reposo, reduciendo así los niveles de presión arterial. Sin embargo, son necesarias más pruebas para corroborar este beneficio.

Estado de equilibrio

Se encontró que el reiki causa cambios deseables en la personalidad, como mejora de la autoestima, cambio hacia el mejor control interno y un sentido realista de control personal.

Apoyo contra el cáncer

No, el reiki no es un tratamiento contra el cáncer, pero sí parece ser de ayuda para aliviar, relajar, reducir la percepción del dolor, mejorar la calidad de vida y disminuir la fatiga en pacientes que se someten a tratamientos tradicionales, como quimioterapia. Esta técnica suave es adecuada incluso para pacientes muy frágiles, por lo que es ampliamente aceptada en hospitales.

Contra el dolor

Distintos estudios analizaron pacientes que recibieron reiki y los compararon con aquellos que recibían medicamentos estándar para el dolor (opioides), reportando en muchos casos mejores resultados. Los investigadores indican que se necesitan más estudios para comprender esta asociación, que puede ser de gran ayuda considerando que esos fármacos suelen provocar dependencia.

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Un lugar en la medicina

Después de décadas de ser menospreciado, la efectividad del reiki parece ganar un nuevo respeto dentro de la comunidad médica. Actualmente, se ofrece educación de reiki en forma gratuita en más de 800 hospitales estadounidenses, con el objetivo de acelerar el proceso de curación y aliviar el dolor de los pacientes.

Como una forma segura y suave de activar el sistema nervioso a través de la relajación profunda, el reiki tiene el potencial de ayudar a aliviar una amplia gama de enfermedades crónicas. Pero recuerda, no puede curar una afección de la salud, por lo que no debe considerarse como una alternativa a la medicina tradicional, sino como un complemento útil.

Fuentes consultadas:

Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Centro Nacional de Salud Complementaria e Integral, Clínica Mayo.