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Hace 100 años, no existían las computadoras portátiles, ni los jacuzzis, o los suplementos de testosterona, adiciones de la vida moderna que han afectado la fertilidad masculina porque modifican en forma negativa la calidad del esperma.

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Según explica la Biblioteca Nacional de Medicina, la infertilidad masculina se define como la incapacidad de concebir luego de un año de mantener relaciones sexuales sin protección. Afecta a una de cada 6 parejas en edad fértil, y, contra lo que el imaginario popular cree, en el 40% de los casos el problema está en el hombre.

En el otro 40%, el problema descansa en la mujer. Y hay un 20% de casos en los que la infertilidad se debe a causas combinadas.

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Zev Rosenwaks, director del Centro de Fertilidad del New York Presbiterian Cornell Medical College, asegura que el 70% de los casos de fertilidad masculina son tratables. Y, en el 25% de ellos, el problema de infertilidad se evitaría simplemente cambiando estilos de vida que ponen en riesgo al esperma.

¿Cuáles son los cambios posibles? El especialista, cuyo equipo condujo el primer tratamiento por fertilización asistida exitoso en el país, indica algunos de ellos:

• No usar laptops sobre las piernas. Las ondas calientes que emite una computadora apoyada en las piernas puede afectar el esperma. Que pueden modificar la temperatura del escroto hasta en 5 grados Fahrenheit en una hora.
• No fumar, beber en exceso o consumir drogas. Estos hábitos afectan la producción de testosterona (la hormona masculina) y, por ende, la producción y calidad del esperma.
• No utilizar esteroides anabólicos. Estas controversiales sustancias podrán hacer crecer los músculos, pero alteran la química cerebral que le “indica” a la próstata y a los testículos que deben producir espermatozoides.
• No abusar de baños calientes. Todo lo relacionado con modificar la temperatura de los testículos perjudica la calidad del esperma.

Por el mismo motivo no se deben usar pantalones apretados, o ropa de ciclismo pegada a la piel.

Otra de las conductas que puede prevenir el deterioro espermático es protegerse de enfermedades de transmisión sexual, es decir, utilizar condón.

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