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Cuando el mundo ya estaba acostumbrado a su extremadamente-redonda delantera, la esposa de David Beckham decidió sacarse las siliconas.

Pero parece que no es el primer “altibajo” de “Posh”. Según fotos que publica el DailyMail, a partir de su primera aparición en público en 1997, cuando formaba parte de las “Spice girls”, la celebridad se mostró en varias ocasiones con diferentes tamaños de senos.

Al principio, parecía una auténtica tabla de planchar, pero unos meses después de hacerse famosa, ya tenía unos pechos bien formados. Así se la vio en 1998, cuando promocionaba la película “Spiceworld”.

Dos años más tarde, en agosto de 2000, sorprendió a la prensa, cuando apareció en la alfombra roja sin sus dos globos… Pero la tristeza de sus fanáticos duró poco porque en abril de 2004, dejó a todos con la boca abierta cuando mostró su escote con unos implantes mucho más grandes y sobre todo…¡arriba!

Ahora, con una imagen más refinada, la ex Spice Girl y ahora empresaria de la moda, confesó a la revista Vogue que decidió sacarse los implantes para ser una persona “normal”.

Según la ex estrella pop, en una época estuvo obsesionada por tener una imagen perfecta, sin embargo en la actualidad prefiere un aspecto natural. “Soy una chica normal e intento sacar lo mejor de lo que tengo. Soy increíblemente corriente”, expresó. Ésta es la razón por la que decidió volver a visitar el quirófano. Pero esta vez, la cirugía no fue para agregarse sino para sacarse los implantes.

¿Qué hay que tener en cuenta antes de operarse?

Me los pongo, me los saco

La decisión de Victoria Beckham no deja de sorprender, ya que la cirugía de aumento de busto es la Nº 1 en la lista de cirugías estéticas. Según la Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos (ASAPS, su sigla en inglés), en 2009 se realizaron 298,328 operaciones de este tipo, mientras que hubo 19,857 operaciones para remover los implantes. Son muchas las razones que pueden influir en la decisión de remover los implantes. “Algunas de estas variables son impredecibles, tales como la forma en qué responderá el tejido del pecho al implante, la evolución de las cicatrices, y las alteraciones normales de la forma del pecho, a través del paso del tiempo, la pérdida o aumento de peso, o los embarazos”, informa la SACP.

El procedimiento es similar al de aumento de busto: se puede realizar con anestesia general o local y dura entre 30 minutos y una hora. La incisión se hace debajo del pliegue del pecho o en la aréola, debajo del pezón.