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Un fanático de los Bee Gees dijo en su blog cuando murió Robin Gibb en el 2011, que la mejor forma de hacer el duelo por la muerte de uno de sus ídolos era escuchando su música.

No cabe duda que en miles de casas, autos, en el pequeño espacio de los iPods sonará en estos días más que nunca la música de Jenni Rivera, "La Diva de la Banda", quien falleció de manera abrupta a los 43 años, al estrellarse el avión en el que había despegado de Monterrey el domingo 9.

Lo mismo ocurrió con Michael Jackson, Donna Summer, Whitney Houston. Con ellos, también el recurso de la celebración colectiva funcionó para muchos. Espontáneamente, grupos se concentraron frente a las casas de los fallecidos, en las esquinas de los barrios dónde nacieron, portando fotos, tarareando y bailando sus populares temas.

Según el psicólogo Jorge Bucay, algo fundamental es no sentir vergüenza por llorar al ídolo perdido.

En uno de sus libros que conforman la serie "Hojas de Ruta", cuenta el proceso del duelo y éste abarca estadios en los que el llanto juega un lugar central.

Es que cuando el ídolo, el artista, en este caso la querida Jenni, muere, está muriendo un ser querido.

"No hay que sentirse ridículo porque lloramos a alguien que en definitiva no conocemos, ese artista para nosotros es parte de nuestras vidas, es importante, es nuestro amigo, nos guía con su música", expresó el conductor de American Idol Ryan Seacrest cuando se conoció la muerte de Michael Jackson el 25 de junio de 2009.

Fue muy difícil para los conductores que cubrieron la tragedia, despegarse de la información y permanecer objetivos.

En el caso de los fans, la sinuosa línea de la objetividad, no existe.

Según Bucay, hay que permitirse estar de duelo, expresar esa tristeza y celebrar la vida y el arte del ídolo perdido. El proceso se conoce como "abrir el corazón al dolor".

Y este proceso abarca 20 pasos específicos, que van desde admitir que la persona querida murió, hasta seguir adelante. En el medio: la aceptación, el llanto, la depresión y el click que indica en algún momento que la vida sigue y que deben quedar los buenos recuerdos.

Y no está de más, asegura el experto, saber que en este dolor, no estamos solos. Por eso, las vigilias por los muertos son populares a la hora de "abrir el corazón al dolor". Habrá vigilias, retratos y flores que recuerden a Jenni Rivera. Diálogos virtuales, en las redes sociales. Y allí estarán sus fans, expresando con sus ojos enrojecidos, con sus frases, que están tristes, porque se fue una diva.