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El intenso ritmo de trabajo que tuvo durante casi dos décadas le han cobrado una fuerte factura a su cuerpo.

“Dieciséis años de modelo en pasarela donde tienes que usar tacones y tienes que marcar muy fuerte el paso para mover la cadera te va acabando”, comentó.

Años atrás la modelo sufrió una pequeña complicación. “Empecé con una hernia y la descuidé porque el dolor iba y venía. Tenía cuatro días buenos y uno malo” explicó.

No obstante, la falta de atención a su salud desató que el problema se agravara más en su vida y sufriera una primer crisis en 2009.

“Un día me levanté de la cama y no me pude enderezar, ahí si me asusté. Me fui a hacer unas radiografías y resultó que tenía la hernia ya tocando el nervio ciático” añadió.

Ante la delicada situación, la conductora del segmento de moda del programa “Despierta América” acudió a un ortopedista el cual le sirvió de gran ayuda, pero no fue suficiente.

“Me sentía bien, me tomaba medicamentos, me ponía algo caliente en la espalda y se me pasaba. No le presté mucha atención hasta que vino otra crisis” aclaró.

La modelo había pasado por alto las instrucciones de su ortopedista de no usar zapatillas con plataforma lo cual contribuyó a vivir un segundo episodio.

“Sabía que no podía usar tacones porque el médico me lo había dicho y la verdad es que antes yo muerta que sencilla me los seguía poniendo hasta que un día salí gateando a la regadera para que me cayera algo caliente en la espalda porque no me podía mover, el dolor de la ciática era muy fuerte” comentó.

Debido a la persistencia del dolor, Jiménez, acudió a ver a un neurocirujano el cual le explicó lo delicada que era su situación.

“Ya tenía fisura. Tenía de un lado el disco y del otro lado la hernia. El disco estaba ya casi fuera de la vértebra, entonces me dijeron que me tenía que operar”, describe.

Ante esto, la conductora recurrió a tres especialistas reconocidos en Miami que le ofrecieron varias alternativas, pero todas enfocadas a la operación a largo plazo.

Además, le sugirieron un tratamiento que consiste en colocarle una especie de corsé fabricado a base de varas metálicas que le impedirían trabajar durante cinco meses sin la garantía de quedar del todo recuperada.

Debido a las exigencias de esta alternativa, la presentadora decidió recurrir a un tratamiento con base de electromagnetismo y que le permite seguir trabajando.

“Me ponen imanes que sueltan descargas eléctricas por veinte minutos en el área,  lo que hacen es relajar los músculos de toda esa área. Ya que está relajada me ponen calor súper caliente a lo máximo que aguante porque la piel se pone roja e inmediatamente que me quitan eso me ponen una bolsa de hielo para  relajar y desinflamar.

 “El doctor dijo que lo que estábamos haciendo es prolongar el tiempo para darle oportunidad a la ciencia que avance y que en lugar de ponerme algo tan agresivo como el metal puedan ponerme algo plástico” añadió.

Aparte de las complicaciones que sufre en su espalda, el modelaje dejó otras lesiones en el cuerpo de la conductora.

“Me lastimé las rodillas. Me acabé el gel entre la rótula y lo que rodea al cartílago que empieza a rozar el hueso y se empieza a hacer poroso como con piquitos, con láser alisaron esta parte e inyectaron gel para que las rodillas funcionen normalmente” finalizó la presentadora.

Actualmente la presentadora recibe terapias a domicilio y tiene prohibido usar zapatos con tacones altos. La operación en su espalda es inminente.

¿Qué es la hernia de disco?

La columna vertebral está formada por 26 huesos llamados vértebras. Entre éstas hay discos blandos rellenos de una sustancia gelatinosa. Estos discos amortiguan a las vértebras y las mantienen en su lugar. Una hernia de disco es un disco que se desplaza fuera de su lugar o se rompe. Si ejerce presión sobre un nervio, puede causar dolor de espalda o ciática.

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