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Resumen:

Los indios Chumash y otros indios de California han usado la yerba santa (Eriodictyon californicum) y otras especies relacionadas (Eriodictyon crassifolium, Eriodictyon trichocalyx) por muchos siglos en el tratamiento de las afecciones pulmonares, producción de saliva y para detener el sangrado de cortaduras menores y rasguños.

En Estados unidos y Gran Bretaña, la Eriodictyon californicum se usó formalmente para las afecciones como gripe, neumonía bacterial, asma, bronquitis y tuberculosis desde finales de los años 1800 hasta los años 1960 (cuando las regulaciones de medicamentos se volvieron más estrictas en la prueba de eficacia). Posteriormente, los extractos siguen siendo reconocidos como seguros (lista GRAS) como un saborizante para alimentos, cervezas y productos farmacéuticos (como para ocultar la acritud de la quinina). También se han usado extractos de la planta de Eriodictyon en cosméticos.

Las especies de Eriodictyon contienen flavones con propiedades de erradicación de radicales libre (antioxidantes) y por tanto, se han propuesto como beneficiosas para una serie de afecciones de salud. Sin embargo, existen pocos estudios científicos de la yerba santa en los seres humanos y no se ha demostrado ninguna efectividad para alguna afección en particular.

Usos:

Los siguientes usos están basados en la tradición, teorías científicas o investigación limitada. A menudo no se han probado completamente en humanos y no siempre se han demostrado su seguridad y eficacia. Algunas de estas afecciones son potencialmente serias y las debe evaluar un proveedor médico calificado. Podría haber otros usos propuestos que no están señalados a continuación.

Alergias, antibacteriano, antimicótico, anti-inflamatorio, antiparasitario, antioxidante, antiviral, artritis, asma, trastornos de coagulación de la sangre, cáncer, cosméticos, boca seca, excipiente (ingrediente inactivo) para el consumo de droga, saborizante de alimentos, hipercolesterolemia (colesterol alto), hipertensión (presión arterial alta), malaria, producción de saliva, rasguños en la piel, relajante de músculo liso, tuberculosis, infecciones del tracto urinario.

Evidencia:

Se han sometido a prueba los siguientes usos en humanos o animales. La seguridad y eficacia de los mismos no siempre se han demostrado. Algunas de estas afecciones son potencialmente serias y las debe evaluar un proveedor médico calificado.

• Afecciones pulmonares (C)

  Existe un historial clínico extenso del uso de los extractos de Eriodictyon en afecciones pulmonares como gripe, neumonía bacterial, asma, bronquitis y tuberculosis. Sin embargo, se necesitan estudios adicionales para hacer una recomendación sólida.

Seguridad:

Los profesionales de la salud que tienen instrucción formal practican muchas técnicas complementarias, de acuerdo con los estándares de organizaciones nacionales. No obstante, este no es el caso universal; es posible que se presenten efectos adversos. Debido a la limitada investigación existente, en algunos casos solamente hay poca información disponible sobre la seguridad del tratamiento.

Alergias

Evítese en personas con una alergia conocida o hipersensibilidad a las especies de Eriodictyon.

Efectos secundarios y advertencias

No existen informes publicados de toxicidad que se atribuyan claramente a la yerba santa (Eriodictyon californicum), aunque los indios de California han usado esta hierba por varios siglos por creer en su seguridad. No obstante, no existen evaluaciones científicas disponibles de toxicidad o seguridad.

Embarazo y lactancia

La yerba santa no se recomienda en mujeres embarazadas o en período de lactancia debido a la falta de evidencias científicas disponibles.

Las posibles interacciones:

Interacciones con drogas

Los flavonoides homoeriodictiol y eriodictiol que se encuentran en la yerba santa pueden interferir en la forma que el cuerpo procesa ciertas drogas usando el sistema de enzimático "citocromo P450" del hígado. Como resultado, los niveles de estas drogas se pueden aumentar en la sangre y esto podría provocar mayores efectos o reacciones adversas potencialmente serias. Los pacientes que usan cualquier medicamento deben revisar el paquete que viene al interior y hablar con un profesional médico calificado, incluso un farmaceuta, sobre las posibles interacciones.

Interacciones con hierbas y suplementos alimenticios

Los flavonoides homoeriodictiol y eriodictiol que se encuentran en la yerba santa pueden interferir en la forma que el cuerpo procesa ciertas hierbas o suplementos usando el sistema enzimático "citocromo P450" del hígado. Como resultado, los niveles de otras hierbas o suplementos se pueden volver muy altos en la sangre. También podría alterar los efectos que otras hierbas o suplementos posiblemente tengan en el sistema P450.

Dosificación:

Adultos (18 años y mayores)

No existe una dosis que se haya probado que sea segura o efectiva para la yerba santa en los adultos. Tradicionalmente, 1-2 mililitros de extracto líquido se han ingerido vía oral con una cuchara cada 3-4 horas por un máximo de diez días.

Se han preparado cataplasmas al machacar 0.2 kilogramos de hojas en 1,000 mililitros de agua. Las hojas se han usado tradicionalmente como un tratamiento para la congestión pulmonar al colocar hojas un poco húmedas en el pecho. El cataplasma se usa normalmente una o dos veces al día diario hasta por dos semanas.

Niños (menores de 18 años)

No existe una dosis que se haya probado que sea segura o efectiva para la yerba santa en niños. Tradicionalmente, se ha usado un mililitro de extracto de alcohol en los niños. Se aconseja tomar precaución en niños debido a la presencia de etanol. También se han aplicado cataplasmas en la piel.

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No obstante se han estudiado de forma científica ciertas técnicas complementarias y alternas, para la mayoría de las terapias hay limitación o controversia sobre los datos de alta calidad respecto a la seguridad, eficacia y mecanismo de acción. Se recomienda, al máximo posible, que los practicantes cuenten con licencias expedidas por una organización profesional reconocida que se adhiera a normas claramente publicadas. Además, antes de iniciar una nueva técnica o contratar a un practicante, se recomienda que los pacientes consulten con su(s) proveedor(es) médico(s) principal(es). Se deben considerar atentamente los beneficios y riesgos potenciales (incluye los costos financieros) así como las alternativas. La siguiente monografía está diseñada para ofrecer una historia y un resumen de la investigación con orientación clínica, y la misma ni defiende ni se opone al uso de una terapia en particular.