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Salma Hayek se mantiene en forma siguiendo una dieta líquida. Recientemente confesó a la prensa que hace 15 años es fanática de las depuraciones con jugos naturales. 

Este programa de desintoxicación y depuración lo realiza durante 3 o 5 días. Consiste en reemplazar las comidas diarias por 6 jugos de uva, ananá, sandía, lima, leche de almendras o agua de coco. Tiene un aporte diario de 1200 calorías y permite evitar los picoteos fuera de hora y el consumo de cafeína.

Tal es su fanatismo por los jugos naturales, que en 2010, Hayek se asoció con Erik Helm, propietario de Juice Generation y entre ambos han desarrollado la bebida depurativa Cooler Cleanse, de la que la actriz fue la imagen corporativa. 

Jugos y algo más... 
Ese año también sorprendió a la prensa al declarar en “Late Show”, el programa de David Letterman, sus preferencias por los insectos a la plancha y las hormigas fritas con guacamole, los gusanos marinados y los saltamontes. 

Según explicó la actriz "con su sabor ahumado son una delicia que todos deberían probar".

"Viscosos pero sabrosos", decían en la película "El rey León", y tal vez haya que animarse a ver si es cierto.

Pero el secreto de Salma para tener ese cuerpazo incluye algo más que insectos y jugos: la actriz combina sus dietas con ejercicios de yoga, que afirma que le ayudan a perder los kilos de más. De todos modos, y para ayudar un poco a la balanza, se ha sometido a una cirugía estética que le ha reducido dos talles de corpiño.