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La ganadora de 4 Grammys dejó sin habla a todos los que alguna vez la criticaron por ser gorda. Sucedió en una presentación en Beverly Hills, donde apareció enfundada en un adherente vestido rosa chicle ¡y con 20 libras menos (9 kg)!

La cantante de 32 años lo logró con la “Dieta Fresh” que le lleva a domicilio menúes de 1,600 calorías diarias. El servicio es premium e incluye 3 comidas gourmet y 2 colaciones al día, y hay mucha variedad para que el cliente siempre pueda tener una opción de su agrado. Una de las comidas por ejemplo, es un paninni de granos enteros con albahaca, tomate y mozarella, o uno con chocolate y frambuesas. Su preparador físico, Tee Sorge, le indicó que deje de lado las grasas y los azúcares, aunque le dio un día de permiso para comer lo que ella quiera, fuera de la dieta.

En cuanto a su entrenamiento, la rubia asistió a clases de yoga y siguió el programa ideado por Sorge, un especialista en celebridades. El la ayudó a ponerse en forma y erradicar sus sentimientos depresivos, que la hacían sufrir terriblemente cada vez que alguien mencionaba su sobrepeso.

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La rutina que Sorge ideó para la intérprete de ‘Pero Me Acuerdo de Ti’, abarca 5 días semanales durante varias horas. La actividad comienza con un precalentamiento en bicicleta fija durante 10 minutos. Luego realiza entrenamiento con pesas para tonificar brazos, piernas y pectorales, y no dejan de lado los abdominales, de los que hacen varios y con muchas repeticiones.

La artista, que saltó a la fama de la mano del club de Disney, perdió el control de su peso después de ser madre, y también a causa de su divorcio de Jordan Bratman en 2010. Y si bien en un principio declaró que no le importaba, las evidencias demostraron que no era tan así. Hoy se la ve radiante, y según afirmó, quiere bajar algunas libras más.

La exposición a las cámaras parecen afectarla considerablemente, y admite que necesita tener “recreos” para conectarse consigo misma. En la intimidad de su hogar, le gusta “ponerse una remera y dedicarse solamente a ser la mamá de Max”. Su hijo de 5 años está a punto de comenzar el jardín de infantes.