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La remolacha, además de ser una sabrosa hortaliza, tiene varias propiedades para cuidar la salud: ayuda a incrementar la fuerza muscular tras el ejercicio físico, reduce la hipertensión y contribuye a la recuperación de los pacientes cardíacos. 

Por si fuera poco, ahora los científicos descubrieron que uno de sus compuestos, llamado betanina, tiene la virtud de evitar que los péptidos beta-amiloide se unan formando placas que llevan a la enfermedad de Alzheimer. 

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Las proteínas beta-amiloide cumplen numerosas funciones básicas en el cuerpo, pero a veces progresan hacia una estructura errónea y se enredan entre las neuronas, causando la muerte de éstas, a través de un fenómeno progresivo, según informa la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU.

El poder de la remolacha

La betanina que contiene podría bloquear los efectos del cobre sobre la proteína beta-amiloide, evitando la formación de placas que llevan a la muerte de las neuronas, según hallaron los investigadores de la Universidad del Sur de Florida en Tampa (EE.UU.).

Las conclusiones del estudio fueron presentadas en el Congreso Nacional de la Sociedad Estadounidense de Química (ACS) realizado en marzo de 2018 en Nueva Orleans.

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Una gran vía de investigación

“Nuestros hallazgos sugieren que la betanina, un compuesto que se obtiene del extracto de la remolacha, es un inhibidor muy prometedor de algunas reacciones químicas específicas que tienen lugar en el cerebro y que se encuentran directamente implicadas en la progresión de la enfermedad de Alzheimer” dijo a ABC Li-June Ming, líder de la investigación.

En el estudio, los científicos probaron un compuesto utilizado en laboratorio para medir el proceso oxidativo de las neuronas y lo expusieron a varias sustancias para comprar su efecto. Luego lo midieron con sofisticadas técnicas y observaron que con la betanina se reducía en más de un 90% la oxidación, lo que sugiere que se había evitado que la proteína beta amiloidea adquiriera una estructura errónea.

Entonces, ¿la betanina de la remolacha previene la formación de las placas? “No. pero sí reduce la oxidación. Y esta menor oxidación previene los plegamientos erróneos hasta cierto nivel, quizás hasta el punto de que ralentice la formación de los péptidos beta-amiloide. Un aspecto importante dado que se cree que ésta es la causa principal del alzheimer” dijo Darrell Cole Cerrato, co-autor del estudio.

Por lo pronto, los investigadores sugieren que hay que seguir estudiando, pero que éste es un gran paso que puede animar a otros científicos a profundizar en el tema, dado el gran alcance que tiene el Alzheimer (la forma más común de demencia) en todo el mundo.