Muerte, enfermedad, fama y otra muerte

"La vida nos presenta situaciones inesperadas, las cuales verdaderamente no estamos capacitados para enfrentar, como la muerte, la enfermedad, y en mi caso, también la fama", cuenta Thalía. Su padre murió de diabetes cuando era niña, y su madre falleció a causa de un derrame poco después de terminar su libro. "Esas experiencias me forjaron para convertirme en la persona que soy", Thalía, pag. 34.

Proceso de reencuentro y aceptación

Thalía cuenta que escribir el libro para ella fue un estilo de terapia después de años de inseguridades y depresión por el amor y la fama. “Así surgió la idea de este libro… rescatar a la niña-mujer para tener un futuro sólido… necesitaba ver a esa niña a los ojos y reencontrarme con ella”, Thalía pag. 41.

Encontró la respuesta en sí misma

La cantante explica que durante su trayectoria, se aferró a su madre, a los hombres de su vida y finalmente hasta a los médicos y psicólogos, pero al final el cambio vino de ella misma. "La clave es aceptarnos tal y como somos", dice. "Ninguna red social ni los muchos expertos que he visitado en busca de respuestas son responsables por mi paz mental", Thalía pag. 40.

Reto #1: Se perdía en sus personajes

Thalía atribuye sus cambios de ánimo a la actuación, y cuenta que era muy dificil para ella distinguir entre su vida y la de sus personajes. "Es que siempre vivía en carne propia los sufrimientos de mis personajes. Creo que por eso caí en depresión tantas veces mientras hacía novelas", cuenta la estrella.

Reto #2: Viajera extrañando su patria

Thalía describe lo difícil que fue, y aún es, vivir en EE.UU. lejos de su adorado México. “Seguramente, mucha gente se identificará conmigo al decir que la añoranza de la patria es uno de los sentimientos de nostalgia más fuertes que se puedan sentir. Es como que te arrancan de raíz, un pedazo de entraña, dejándote un vacío imposible de llenar”, Thalía pag. 140.

Reto #3: Manías ilógicas

Entre viajes, giras, y grabaciones, la inestabilidad en su vida se vió reflejada en su salud mental. "Comencé a desarrollar cierto tipo de manías. Cuando no hay una estructura normal en lo que vives o experimentas en la vida, de manera subconsciente desarrollas lo que se conoce como agorafobia, que es un trastorno de ansiedad" Thalía, pag. 125.

Desesperada por encontrar equilibrio

“Lo que estaba buscando era seguridad, sentir que tenía control de mi vida y de mi mente al seguir estos rituales que había formado”, Thalía, pag. 125. La agorafobia, o temor a entrar en pánico en un lugar donde no podría recibir ayuda, y las otras manías que había desarrollado eran lo único estable y constante que tenía.

'Dios aprieta, pero no ahoga'

Quién diría que en el momento que más fama tenía, aquella mujer hermosa que siempre sonreía, guardaba una tristeza tan profunda. Y fue en estos momentos de inestabilidad y depresión cuando decidió buscar ayuda. "Ahí comenzó mi búsqueda… no encontraba luz; tenía un vacío interno, un hoyo en el alma que no podía saciar nada", Thalía pag. 117.

Paso #1: proponerse el cambio

A pesar de sus caídas de ánimo, la cantante muestra una gran fuerza de voluntad, en especial cuando se trata de un reto emocional. "Sí, soy una persona muy disciplinada. Tengo una capacidad innata de hacer lo que se me dice que debo hacer, lo mejor que puedo hacer y en tiempo récord.. la mía era como del más allá", Thalía pag. 100.

Paso #2: Encontrar las herramientas que le ayudarían a vivir en el presente

"Aprendí entre tantas terapias, la importancia de encontrar herramientas que me sirvieran, ya fuera con respiraciones, lecturas o meditaciones… Algo que te permita regresar al presente, y te saque de estar viviendo lo que no existe", rememora Thalía en la página 119 de su libro.

Paso #3: Actividades al aire libre que conectaran su mente con su cuerpo

"Otra de las cosas que me salvó y me devolvió la calma fue buscar actividades al aire libre como hacer alpinismo, yoga y escalar al aire libre. Estas actividades me ayudaron a descubrir un verdadero equilibrio en mi cuerpo, mi mente y mi alma…", Thalía, pag. 119.

Finalmente su cuento de hadas

"Yo nunca había vivido un amor como el que estaba experimentando con Tommy… Me estaba convirtiendo en una mujer plena, entera y con una determinación de guardar esos buenos sentimientos en mi alma para siempre pues sabía que con él compartiría mi vida", Thalía pag. 145.

Al principio no sabía si estaba preparada para ser madre

"Desde que el deseo de tener un bebé surgió en mis entrañas, volvieron los pensamientos obsesivos. Temía no estar preparada para semejante reto", Thalía, pag. 170.

Reto #4: Lista para ser madre sin poder hacerlo

"Cuando por fin decidimos que estábamos listos para concebir, no lo lográbamos… Nadie te dice que después de los 30 años la mujer comienza a disminuir su conteo de óvulos saludables para ser fertilizados. Y que después de los 35 sólo con suerte puedes quedar embarazada", Thalía, Pag. 171

Paso #4: Tener fe y creer en el amor

"Pero todo tiene su recompensa, y esperar sin desesperar es una virtud muy especial.... El amor con sus lazos compasivos, con su gran paciencia, con su sabiduría tejió sus redes para rescatarnos y restaurar nuestros corazones que en esos momentos se habían resquebrajado ante la presión tan grande que tuvimos de vivir", Thalía, Pag. 173

Reto #5: Otra enfermedad, infección de Lyme

“Me pasé meses tirada en cama sintiéndome que me moría y con muy pocas ganas de vivir... Gracias a Dios Tommy estuvo siempre a mi lado”, Thalía, Pag. 241

Paso #5: Pelear por los hijos

“Desde aquel día en que escuché el llanto de mi hija en aquel momento de absoluta desesperación, mi mente cambió por completo”. Su hija Sabrina ahora tiene 3 años y su segundo hijo Matthew Alejandro nació en junio de este año. Sabrina 245

Lección final: su salud está en sus manos, pero su vida en manos de Dios

“Hoy sé que soy la única responsable por mi salud; ella está en mis manos y yo soy su vigilante, su cuidador, y su más aguerrido defensor. Pero… más allá de mi salud, más allá de mi mente, es saber que estoy en manos de Dios porque con cada paso que doy en cada momento de mi vida, Él me alienta y me llena de fortaleza…”, Thalía, pag. 246

Plena mira hacia el futuro

Feliz, plena, completa en espíritu y en familia, la diva mira hacia el futuro, sin arrenpentimientos y con esa fortaleza especial, la que proviene del secreto encanto de haber luchado contra los propios fantasmas... y haber ganado.