La lúcuma es la fruta del lúcumo (Pouteria lucuma), un árbol de la familia Sapotaceae nativo de los valles andinos. Su aspecto es similar al de un aguacate, con una dura piel verde que cubre una pulpa seca y amarillenta. Su sabor es una mezcla de batata y caramelo, pero, a pesar de su dulzor, su índice glucémico es bajo. Esto lo vuelve un fruto apto para quienes viven con diabetes.

Como cualquier fruta, puedes comerla directamente o trozarla y combinarla como más te guste. Sin embargo, es difícil conseguirla fresca, por lo que la opción más común es encontrarla en polvo. Este puede agregarse fácilmente a los jugos, batidos, salsas o para sustituir al azúcar y sumarle aroma a tus comidas. Además, no aporta calorías vacías y posee una amplia variedad de nutrientes.

Además de ser un reemplazo saludable del azúcar, los nativos de la selva andina utilizan la lúcuma para combatir la diabetes, ya que sus compuestos contribuyen a regular la concentración de glucosa en sangre. Sin embargo, este no es el único beneficio que puedes obtener si incorporas esta fruta en tu dieta:

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Rica en antioxidantes

El color de la pulpa de la lúcuma se debe a la presencia de betacaroteno, un excelente antioxidante. Este es de ayuda para promover la regeneración y crecimiento celular y combatir a los radicales libres, moléculas inestables que afectan las estructuras celulares sanas y promueven la aparición de enfermedades.

Buena para el corazón

La evidencia de los beneficios de la lúcuma sobre la salud cardíaca aún es limitada y proviene principalmente de estudios in vitro. Sin embargo, los especialistas creen que su rico contenido de polifenoles y betacaroteno funcionan como reguladores de los niveles de presión arterial y colesterol.

Mejora la salud de tu piel

Esta fruta posee muchas vitaminas y minerales, como vitamina C, potasio y calcio. Estos son esenciales para una buena salud de la piel. La combinación de estos nutrientes junto a sus propiedades antioxidantes, puede promover la regeneración celular y obstaculizar su envejecimiento prematuro, usualmente provocado por la exposición a los rayos ultravioletas.

Ayuda para los intestinos

La lúcuma es una excelente fuente de fibra: 2.3 g cada 100 g. Incluso podemos disfrutar de este contenido cuando la consumimos en polvo. Esto significa buenas noticias para los intestinos, ya que la fibra agrega volumen a las heces y mejora su tránsito para ser eliminadas.

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Estimulante

Es común que se utilice como un energizante natural. El motivo se encuentra en su alta cantidad de carbohidratos, que son las principales fuentes de energía que podemos obtener de los alimentos. Una cucharadita de polvo de lúcuma en tus jugos o comidas aliviarán el agotamiento tanto físico como mental.

Oxigenadora

La lúcuma es rica en hierro, un mineral clave para la producción de glóbulos rojos, y, por consiguiente, lograr un correcto transporte de oxígeno a lo largo del cuerpo. Además de estimular la respiración celular, este mineral favorece la producción de hormonas y tejidos conectivos.

Precauciones

Generalmente, la lúcuma es bien tolerada por la mayoría de las personas cuando se la consume adecuadamente. Sin embargo, existen algunos registros de casos de estrés, insomnio, o cansancio tras una ingesta excesiva. Los expertos creen que esto se debe a sus propiedades energizantes. Ante cualquier duda, consulta con un profesional de la salud.

Recuerda

Hasta contar con evidencia científica significativa proveniente de ensayos en humanos, las personas interesadas en utilizar terapias a base de hierbas y suplementos deben tener mucho cuidado. No abandones ni modifiques tus medicamentos o tratamientos, antes habla con el doctor sobre los potenciales efectos de las terapias alternativas o complementarias.

Fuentes consultadas:

Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Clínica Mayo, Instituto Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa.