Aunque el olor corporal se asocia a la higiene, la realidad es que la interacción entre sudor y bacterias de la piel son su principal causa. El mal olor se concentra en el área de las axilas y los pies debido a la acción de los microorganismos que aprovechan las condiciones húmedas de esas zonas para multiplicarse.

El sudor está compuesto por sustancias como el ácido úrico, urea, agua, cloruro sódico y otros elementos que, al entrar en contacto con las bacterias que se encuentran en la piel, se degradan y fermentan, provocando olores desagradables. Bañarse es una buena manera de empezar a combatir esta condición, al igual que lavar la ropa.

Los desodorantes sirven para enmascarar el mal olor que produce la sudoración, pero no están diseñados para evitar que sudemos. En cambio, los antitranspirante tienen la finalidad de evitar la sudoración a través de un tapón en las glándulas que secretan el sudor, generalmente con pequeñas cantidades de sales de aluminio. Algunos tienen efectos antibacterianos.

Ingredientes de los desodorantes

Ya sea en roll on, espray, gel, stick o crema, la mayoría de los desodorantes contienen alcohol, formaldehidos, ácido bórico y perfumes para enmascarar el olor. También germicidas, como el triclosán, para matar las bacterias. Si tienen acción antitranspirante pueden tener cloruros e hidróxidos de aluminio y circonio como ingredientes activos. Sin embargo, la naturaleza también nos ofrece opciones efectivas:

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Bicarbonato de sodio

El bicarbonato de sodio es un ingrediente que no debe faltar en ningún botiquín de remedios caseros, ya que ayuda a absorber la humedad de la piel y mantiene la zona seca por más tiempo. La mejor forma de utilizarlos es después de la ducha, sobre la axila completamente seca y sin dejar residuos o exceso de talco. Es excelente para neutralizar olores, y, además, mucho más barato y efectivo.

Vinagre de manzana

El vinagre de manzana es otro ingrediente que puede actuar como desodorante natural. Por su acidez, neutraliza el pH de la piel ayudando a controlar el mal olor de la axila y eliminando las bacterias que causan olor corporal. Puedes empapar una bola de algodón o una gasa con vinagre y aplicar directamente en las axilas ya que no produce irritación.

Fécula de maíz

La fécula de maíz es un remedio perfecto para luchar contra el mal olor, ya que es capaz de absorber el exceso de humedad y te ayudará a estar seco y fresco por más tiempo. Después de bañarte o lavar bien tus axilas puedes empolvarlas con fécula de maíz para neutralizar el olor.

Piedra de alumbre

En la sabiduría popular la piedra de alumbre es considerada un desodorante natural por excelencia, ya que además de evitar el mal olor, tiene propiedades bactericidas y astringentes. Tiene la capacidad de cerrar poros y regular la sudoración, eliminando, a su vez, a las bacterias que provocan el mal olor. Simplemente se moja la piedra y se aplica de forma similar a la barra de un desodorante.

Aloe vera

El aloe vera o sábila ayuda a eliminar el mal olor sin obstruir los poros ni interferir en el proceso de eliminación de toxinas. Las antraquinonas, unas sustancias que contiene, poseen acción bactericida y fungicida, que permite eliminar el exceso de bacterias en la piel. El gel de aloe vera, ese líquido de color blanco, es lo que debes usar para aprovechar sus propiedades.

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Jugo de limón

Históricamente el limón se ubica en el podio de los frutos más usados como remedios caseros. Es considerado un excelente desodorizante y ayuda a neutraliza los olores. Al momento del baño pulveriza el zumo de un limón en la zona de las axilas, deja actuar hasta que seque bien, no es necesario que enjuagues, deja respirar las axilas antes de vestirte.

Romero

El romero es una planta aromática de suave y exquisita fragancia, en la medicina natural se le atribuyen propiedades antibacterianas. Su aceite se utiliza en la actualidad para combatir el mal olor, ya que inhibe el crecimiento de bacterias. Para preparar un desodorante casero necesitas hojas secas de romero, hervir durante 10 minutos, ponerlas en otro recipiente y añadir alcohol.

Otros aceites esenciales

Podemos obtener aceites esenciales (destilados de plantas) de muchas hierbas útiles para combatir el mal olor. Entre ellas se destacan la jojoba, lavanda, árbol de té, caléndula y tomillo. Puedes diluir algunas gotas en tu desodorante, especialmente si es líquido o en crema, para aprovechar sus propiedades antisépticas, ideales para combatir infecciones de virus, bacterias u hongos.

Precauciones

Los investigadores advierten que ciertos hábitos, como la alimentación, pueden favorecer los malos olores corporales. Para no padecer este problema, intenta evitar o disminuir el consumo de alcohol, café, carnes roja, pescados, crucíferas (cómo coles, brócoli o repollo), espárragos y ajo, entre otros.

Fuentes consultadas

Academia Estadounidense de Dermatología, Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Departamento de Agricultura de EE. UU., Instituto Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa.