Se conoce como té verde a la hoja seca de Camellia sinensis, planta de la que también surgen otras variedades de té. De la hoja sometida a poca oxidación se obtiene el Oolong, con un proceso mediano de oxidación se consigue el negro, el "sobrefermentado" es el té Pu-erh o rojo, mientras que sin fermentar es el verde. Consumiéndolos regularmente puedes obtener estas bondades:

Mejores defensas

La evidencia científica vincula el consumo regular de té verde con una menor incidencia de infecciones bacterianas o virales, en comparación con quiénes no lo beben. Esto es posible gracias a la presencia de catequinas en la infusión, que contrarrestan la adhesión de microorganismos a las paredes celulares y la liberación de toxinas por parte de estos.

Anticancerígeno

Según diferentes investigaciones, el contenido del té verde en polifenoles, como el galato de epigalocatequina, o en catequinas, resulta útil para eliminar a los radicales libres, moléculas inestables que aumentan el riesgo de ciertas enfermedades, como el cáncer. Esta bebida también ayuda a inducir la muerte celular o apoptosis de las células cancerosas.

Pérdida de peso

Esta infusión ayuda a las personas a perder peso al mejorar la tasa metabólica, promoviendo así un consumo más rápido del almacenamiento de grasa corporal. Muchos especialistas aseguran que bebiendo una o dos tazas todas las mañanas podrás ver los beneficios. Pero recuerda, siempre debes acompañarlo con una dieta equilibrada y ejercicio regular.

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Tonificador

Debido a sus importantes propiedades astringentes, el té verde provoca contracciones musculares y en los tejidos, lo que ayuda a tonificar los músculos y la piel. Este beneficio puede extenderse a las encías, ya que realizar enjuagues bucales con esta infusión se asocia a la prevención de la debilidad dental. Incluso algunos estudios indicaron su uso para mejorar la salud cabello, volviéndolo más fuerte y resistente.

Energizante

Si bien para este propósito ya existen bebidas específicas, en muchos países de Asia es común recurrir al té verde para obtener más energía, especialmente para realizar actividades físicas. También se aprovecha para contrarrestar el dolor muscular producto del ejercicio o del sobreesfuerzo. Pero cuidado, beberlo en exceso puede ser contraproducente debido a la presencia de cafeína.

Controla la diabetes

Gracias a sus propiedades antioxidantes, astringentes y a su naturaleza alcalina, el té verde puede ayudar a controlar los niveles de glucosa en sangre ¿El motivo? Este coctel de propiedades estimula el buen funcionamiento del páncreas, órgano encargado de la secreción de insulina, y, por lo tanto, de una correcta descomposición y absorción del azúcar.

Desintoxicante

El té verde se encuentra en la lista de remedios naturales para combatir la resaca y la fatiga causada por el consumo de bebidas alcohólicas o falta de sueño. Los expertos señalan que, bebiéndolo con limón, los agotadores efectos del alcohol desaparecerán. Nuevamente, la prudencia resulta esencial, de lo contrario puede causar deshidratación y potenciar los efectos de la resaca.

Estimulante

Tal vez sea uno de los motivos más antiguos por el que se lo consume. La capacidad estimulante del té verde se debe a su contenido rico en cafeína y taninos, que, aunque pueden resultar adversos para la salud cuando se lo consume en exceso, en pequeñas medidas actúan como estimulantes naturales. Por ello, se alza como una gran opción para combatir la fatiga o la somnolencia.

Retrasar el envejecimiento

Entre los efectos negativos de los radicales libres se destaca el incremento de los signos del envejecimiento. Esto puede combatirse con un consumo regular el té verde, gracias a que posee propiedades antioxidantes (gracias a la presencia de galato de epigalocatequina) capaces de neutralizar el estrés oxidativo que producen estas moléculas inestables.

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Bueno para el corazón

Debido a su alcalinidad, muchos investigadores señalan que el té verde puede reducir los niveles de colesterol "malo" en sangre. Además, sus propiedades antioxidantes evitan que este se oxide, aumentando el riesgo de enfermedades del corazón, como accidentes cerebrovasculares o enfermedad coronaria. Incluso existe evidencia que vincula su consumo con una disminución de la presión arterial.

Precauciones

Los riesgos asociados con el té verde son los mismos que se asocian a cualquier otra infusión de C. sinensis (té negro, rojo o oolong), debido al contenido de cafeína y taninos. Entre las principales consecuencias se hallan problemas hepáticos y de sueño, anemia, dolor de cabeza, molestias, irritabilidad o estreñimiento. Por eso, recuerda beberlo siempre con moderación.

Fuentes consultadas

Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Departamento de Agricultura de EE. UU., Instituto Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa.