Los villanos inesperados

¿Sabías que la contaminación ambiental, la soledad, la falta de espacios verdes, la falta de sueño y el estrés son elementos que se interconectan y también pueden afectar la salud cardiovascular? Recientemente la American Heart Association (AHA) nombró a estos factores como enemigos de la buena salud cardiovascular.

Afectan directa e indirectamente

"No es posible controlar algunas de estas cosas, por lo que quizás no pensamos en ellas lo suficiente", dijo el Dr. Amit Khera, director del Programa de Cardiología Preventiva en el UT Southwestern Medical Center de Dallas., EE.UU. "Nos pueden afectar directamente, pero también contribuyen a los demás factores de riesgo principales" agregó. ¿Cómo y por qué pueden hacernos daño?

Más información

1. El aire contaminado

"Las partículas en aire que se absorben en los pulmones ocasionan inflamación que se refleja inmediatamente en el sistema cardiovascular", dijo el Dr. Donald Lloyd-Jones, de la Feinberg School of Medicine de Northwestern University en Chicago. "Eso tiene efectos tóxicos directos" agregó.

Más información

¿Cómo se puede contrarrestar?

A corto plazo, se aconseja que las personas vulnerables permanezcan en interiores o usen máscaras cuando la calidad del aire sea particularmente mala, dicen los expertos. Aunque si llevas una alimentación sana como la dieta mediterránea, puedes mitigar ciertos daños ocasionados por la contaminación del aire, según un estudio publicado en Circulation, el boletín de la AHA.

2. La falta de espacios verdes

Son importantes para la salud del corazón porque están vinculados con la actividad física, los buenos hábitos alimentarios y el bienestar mental. "Las comunidades sin espacios verdes pueden tener menos acceso a comida fresca y saludable, además de problemas sociales", dijo el Dr. Khera. "Si uno no se siente seguro, podría ejercitarse menos". Y agregó que la gente no debería tener que mudarse, sino tener más espacios verdes en su comunidad.

3. El estrés

Lloyd-Jones dijo que el estrés y el aislamiento social, que pueden afectar la salud del corazón, son difíciles de medir y definir, y, por lo tanto, de tratar. "Parece que sí existe una conexión importante entre el cuerpo y la mente. Es fácil señalar que todos debemos reducir el estrés, pero, también es obvio que resulta dificultoso hacerlo" reflexionó.

4. La soledad

Las personas que sufren los efectos psicológicos del estrés y la soledad tienden a fumar y beber más, tienen peores hábitos al dormir y comer, y hacen menos actividad física. Incluso tienen menores probabilidades de tomar sus medicamentos recetados según las instrucciones. Y todo esto afecta la salud cardíaca.

Más información

5. La falta de sueño

Los expertos mencionan al sueño insuficiente como el más importante de todos los factores de riesgo periféricos que no están en los carteles y folletos. La falta de sueño o dormir mal, estimula el riesgo de tener la presión sanguínea más alta, malos hábitos de alimentación, problemas de peso, y fibrilación auricular (ritmo cardíaco irregular potencialmente peligroso), sobre todo si se padece de apnea del sueño.

El peligro de no dormir

“La mala higiene del sueño puede socavar todo" dijo Lloyd-Jones. Un estudio publicado en enero en el Journal of the American College of Cardiology encontró que dormir menos de 6 horas cada noche se relacionó con la acumulación de placa en las arterias, una de las causas de la enfermedad cardiovascular.

Más información

Menos famosos pero muy dañinos

En general, estos 5 factores de riesgo menos conocidos podrían ser más difíciles de determinar comparados con las medidas del peso, la presión sanguínea y el colesterol (los peligros más conocidos). Sin embargo, Lloyd-Jones indicó que deben ser parte importante de las evaluaciones de la salud cardíaca, tanto para los médicos como para que las personas los tomen en cuenta.

Ahora ya los conoces

Ahora ya sabes que para tener una buena salud cardíaca también debes tratar de estar al aire libre en espacios verdes y alejarte en posible de la contaminación, además de mantener una buena rutina de sueño, cuidar la vida social y reducir el estrés. “Ignorar estos factores puede ser muy peligroso” concluyeron los expertos.