1. Reconocerá cuando algo anda mal

Por ejemplo, si tienes un medico de antigüedad, él sabrá cuando algo ande mal con tu salud. Un estudio publicado por el diario ABC de España encontró que entre más tiempo pasa aumenta la confianza entre el paciente y el médico.

2. Sabe qué vacunas te hacen falta

Pese a que a muchos no les gusten, las vacunas son efectivas en la prevención de enfermedades. Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), el sarampión, la influenza, polio, tos ferina, tuberculosis, y otras afecciones se evitarían sólo con un “piquetito”.

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3. El doctor sólo quiere ayudar

Una de las cosas que el médico jamás esperará será tener pacientes sanos con hábitos perfectos. Si bebes más alcohol de la cuenta, consumes comida rápida con frecuencia o tienes antecedentes de alguna enfermedad, hazlo saber. El médico al final lo descubrirá.

4. Puede ayudarte a cambiar de hábitos

Si tras rezarle a todos los santos no logras dejar de fumar, beber, calmar el estrés, la ansiedad o la depresión, acudir con el médico y ajustarte a su programa específico podría poner fin a esta y otras preocupaciones. Claro, también se requiere de tu fuerza de voluntad.

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5. Puede que no tengas la razón

Aunque asegures tener salud puede que no estés en lo correcto. De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina, acudir por una revisión general, aún cuando se piensa que no se tiene nada, es la mejor manera de detectar un problema en sus primeras etapas.

6. Él sabe qué hacer, tú no

De igual forma, si existen antecedentes de alguna enfermedad por parte de familiares cercanos, los CDC recomiendan acudir por una prueba médica, puesto que las probabilidades de presentar afecciones hereditarias son muy elevadas.

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7. Siempre hay razones para hacerlo

Un estudio de la Clínica Mayo, publicado en 2013, halló que los trastornos en la piel, dolor en las articulaciones, colesterol, gripe y tos, ansiedad, depresión y migraña son parte de los principales problemas que se tratan en el consultorio de un doctor en EU.

8. Sobran los chequeos

De igual forma, dependiendo la edad del paciente, existen pruebas y análisis que ayudarán a mantener la salud en línea. Por ejemplo, los análisis de orina y sangre, los electrocardiogramas, radiografías del tórax y ecografía abdominal son los más recurrentes.

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9. Internet no siempre tiene la verdad

Aunque el internet es una efectiva herramienta para consultar información, visitar a un médico siempre será la mejor opción ante los síntomas que presente el paciente. Un informe de Google a principios de 2015, reveló que una de cada 20 búsquedas al mes está relacionada con temas de salud.

10. El único beneficiado serás tú

Pese a la polémica que existe sobre realizarse exámenes anuales, pues algunos usuarios los consideran obsoletos, el Dr. Pieter Cohen, de la Universidad de Harvard explica que estas consultas dan mejor valoración y seguimiento a los expedientes. Al final quién se beneficiará serás tú.

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