Sellar el lomo en aceite por ambos lados, esto es freír sólo la superficie a que dore.
Adobar la carne con los ingredientes
durante dos horas, cubrir y refrigerar.
Utilizar cuero y extenderlo sobre una
mesa.
Colocar en un extremo las tiras de
carne ordenadamente y enrollar apretando bien con las manos; luego amárrelo con
la pitilla o cáñamo, haciendo dos lazadas longitudinales cruzadas y enseguida
enrollar con varias vueltas, bien apretadas.
Meter el arrollado en una bolsa de plástico,
eliminar todo el aire, cerrarla con un nudo ciego y ponerla a hervir durante
dos horas en una olla amplia con agua suficiente para que flote holgadamente.
Retirar del fuego y dejar que se enfríe
lentamente con la olla tapada, una vez fría saque la bolsa del agua y póngala
en refrigeración.
Cuando la gelatina se haya solidificado, abrir la bolsa y retirar el
arrollado, eliminar la gelatina con las manos.
Colocar un poco de salsa de
ají (opcional) y listo.